Los recuerdos que tengo son fabulosos porque fue mi etapa de joven. Empecé a los dieciséis años hasta los veintiocho que me retiré. En todos esos años he ganado muchos amigos y lo recuerdo como los mejores de mi infancia. Además de poder practicar el deporte que me gustaba todos queríamos conseguir jugar en equipos superiores, en el Zaragoza por ejemplo.
Los comienzos son muy entrañables porque era juvenil, con dieciséis años debuté en el club Deportivo Caspe, lo recuerdo con gran satisfacción porque debutamos Antonio Villegas y yo, y el primer partido que jugué con el CD. Caspe metí dos goles jugando de defensa con lo cual, iba súper contento.
Después, a lo largo de mi trayectoria deportiva, he tenido también altibajos. Recuerdo las dos lesiones que tuve, una de rodilla y la otra que me partieron la tibia y el peroné, y claro, esas son las desagradables.
En general, es mi mejor etapa, como eres joven y practicas lo que te gusta, el deporte y concretamente el fútbol, pues era más que satisfactoria la alegría que tenía en poder hacer deporte y jugar con el equipo local, el Club Deportivo Caspe.