Desde la Escuela y yo mismo, estamos muy contentos porque era una petición que llevábamos muchos años demandando en Caspe, y por lo que tengo entendido, muchos coordinadores anteriores a mí lo habían intentado pero siempre nos daban calabazas.
Este año, por suerte, con la colaboración de todos, tanto del club Deportivo Caspe como los directivos de la Escuela, yo personalmente e incluso el Ayuntamiento, nos ha tocado llamar a las puertas de todos los amigos que teníamos y la verdad es que estoy muy contento de que, por fin, nos hayan admitido en un grupo de Zaragoza.
Como el año pasado no hubo equipo y este año sí, nos han incluido, como corresponde, en la categoría más baja de juvenil, pero el objetivo era entrar y luego a ver como funcionamos.