Es un partido clave para ambos. Seguro que tanto ellos como nosotros tenemos este día marcado en rojo en el calendario y lo dicho, se juegan tres puntos. No será nada definitivo porque quedan aún diez partidos pero la verdad es un partido muy, muy importante.
En la segunda vuelta nos hemos aplicado. Quitado el día del Sariñena que íbamos ganando dos a cero en el descanso y nos dieron la vuelta, el resto de partidos no hemos perdido, hemos sacado victorias contra Illueca y Tarazona y el equipo ahora está bien en casa.
Espero un Caspe súper competitivo como lo ha sido hasta ahora. Todos los partidos son igualados, y es un rival muy difícil de batir. A nada que hubiese conseguido un par de victorias en vez de empates estaría fuera del descenso y, pues eso, muy igualado.