Así, los juveniles están adscritos a la Primera Juvenil y tienen el encargo, desde principio de temporada, de intentar el ascenso a la Preferente. En estos momentos ocupan la tercera plaza de la clasificación, de una liga con cuatro unidades de ascenso y que han encabezado durante ocho jornadas.
Los cadetes participan en el Grupo Segundo de la Segunda Cadete y clasifican sextos de dieciséis equipos inscritos. Curiosamente, ese sexto puesto no les es desconocido puesto que lo han ocupado durante nueve jornadas. Tal y como va la liga, su espacio podría fluctuar un punto por arriba o por abajo del mencionado sexto.
Los infantiles tienen dos equipos en liza: los de segundo año en Segunda Infantil y los de primer año en Tercera Infantil. Los mayores son sextos y han superado en dos puntos la moda aritmética de la temporada. Quizás, la defensa de esta cota, la sexta, deba ser su máxima pretensión para el resto de la campaña. En lo que concierne a los de Tercera Infantil, durante la mayor parte de la temporada han sido séptimos y en ese centro de la tabla está su ser.
Por último y en cuanto a los equipos que juegan a fútbol once, los alevines de Segunda Alevín han fluctuado entre la cuarta y quinta plaza, y en esas posiciones es previsible que se debatan el resto de la temporada.
Los otros dos equipos, benjamines y pre benjamines disputan sus partidos en campo de ocho jugadores y el nivel de exigencia es mucho menor. A pesar de ello, la Primera Benjamín es una categoría con niños que muestran una nivel muy alto y los caspolinos son cuartos de un total de dieciséis. Cerramos con los pre benjamines que ya están jugando la Copa Federación.