En la temporada 1962/63, el juvenil del Club Deportivo Caspe disputó la segunda fase de la eliminatoria del Campeonato Regional Juvenil con el Real Zaragoza.
El partido jugado en Caspe finalizó con victoria caspolina por tres a dos pero la vuelta jugada el Día de Reyes, en el campo zaragozano de Torrero, favoreció al conjunto de la capital por diez goles a cero.
A pesar de la amplitud del resultado, los técnicos zaragocistas se fijaron en el cancerbero caspolino, Javier Monclús Godina, y se lo llevaron a Zaragoza.
"Mi fichaje fue… jugamos en Zaragoza en el campo de Torrero.
Entre este partido y el de Caspe es cuando surgió.
Me estuvieron mirando para fichar por el juvenil del Real Zaragoza.
Llegamos a un acuerdo y estuve jugando un año, mi último año de juvenil, con los juveniles del Real Zaragoza.
Fue un año muy bonito y de recordar. Me lo pasé bien.
Al acabar la temporada quedé a disposición del Zaragoza y me mandaron a probar con el Barbastro y con el Huesca, pero yo no quería marcharme de casa.
Entonces, bajé a Caspe y continué jugando con el Club Deportivo Caspe."