Delantero alto y espigado. Perteneció a la disciplina del club durante dos temporadas, la 1988/89 y la 1993/94, en ambos casos a las órdenes de Paco Corpas.
Cacho es hoy médico adjunto de Urgencias en el Hospital Obispo Polanco de Teruel, desde donde nos evoca una curiosa anécdota acaecida en agosto de 1993, en el partido de presentación de la plantilla:
"el club había hecho un importante esfuerzo trayendo al R.C.D.Espanyol de veteranos, por lo que tanto los jugadores como la afición estábamos muy ilusionados con la disputa del partido.
Llegamos a los Rosales el día señalado y tras coger la equipación salimos a calentar, muy motivados al ser la puesta en escena del equipo ante su afición. Pero el Espanyol no llegaba. Pasaron los minutos y el club recibió una llamada: el autobús del Espanyol se había estropeado en pleno viaje, de modo que les iba a ser imposible llegar a Caspe.
Fue una decepción bastante grande, pero acabamos jugando entre nosotros y el público disfrutó del ambiente festivo".
Cacho ha guardado durante 27 años la camiseta y el pantalón que vistió aquel día, hasta que recientemente lo ha devuelto al club para que engrose su pequeño gran museo de recuerdos. A cambio, Cacho luce la actual elástica caspolina y promete bajar a Caspe algún domingo de la próxima temporada para evocar aquellos años tan gratos.