Ante la situación que nos ha tocado vivir y a pesar de que nos hayan dado el trece de febrero como fecha en el horizonte, pienso que, siendo realistas, es complicado.
El grupo no pierde la esperanza, estamos con ganas, estamos preparados para todo lo que nos digan y la esperanza es lo último que se pierde. Pero siendo conscientes de que es muy complicado y lo primero y más importante es la salud.
Como sanitario parece que eres un poco más consciente de todo.
Tomando las medidas y sabiendo que el deporte al aire libre, en sí, no es peligroso.
Sí puede serlo, meterte veinte personas en un vestuario o juntarnos demasiados en un campo, eso puede ser un foco de contagio.
Por ello, habrá que cumplir lo que digan los sanitarios que son los que saben.
Nosotros seguimos entrenando, ya sea individualmente o los entrenamientos en Zaragoza y cuando digan la fecha estar preparados.
Si no nos dejan, afrontaremos el año que viene con más ganas todavía, si cabe.