Al fin y al cabo, entrenar sin competir se hace un poco duro mentalmente.
Con la nueva fecha que ha puesto la Federación y el visto bueno de Sanidad, esto parece que va para adelante y que podemos ver la luz al final del túnel.
El equipo… si es verdad que al principio se hacía un poco duro, sin fecha, pero ahora se ve otra cosa en los entrenamientos.
No se ha bajado la intensidad en ningún momento pero pienso que ahora estamos mejor anímicamente.
Sabíamos que en algún momento se tenía que jugar la competición porque la categoría es dependiente de Tercera División, y esa era nuestra mentalidad: que en algún momento u otro se tenía que jugar y así ha sido.
Últimamente entrenando dos días a la semana porque, desgraciadamente, no podíamos subir a Caspe por los confinamientos de Zaragoza y otras zonas.
Pero hemos estado a tope en todo momento y a expensas de poder jugar dentro de dos semanas el primer partido.