Estuve en Caspe jugando hace tres años, me trataron genial y donde se está bien hay que volver siempre.
Yo encantado de que me den la oportunidad y poder ayudar al equipo en lo que sea necesario.
Con Carlos Gil coincidí como jugador el año que estuve allí y luego, pues eso, por la buena relación que tengo con él, de vez en cuando me pedía que le echara una mano y yo encantado.
Conozco al cuerpo técnico, conozco a los jugadores y para mi era una suerte bajar con ellos a entrenar e intentar ayudar al equipo en lo que pudiera.
Voy a estar a cargo de la preparación de los porteros e intentaré ayudarles en lo que pueda. Trabajar con ellos e intentar mejorar día a día para que los porteros estén preparados y cuando se necesite de ellos estén en la mejor forma posible.
Creo que el Caspe está donde se merece estar, por gente, por directiva, por jugadores, intentaré echar una mano y que por fin se mantenga la categoría y que se esté en esta categoría hasta donde se pueda.