En el partido de ayer, con corazón y mucho esfuerzo conseguimos darle la vuelta al marcador, igualarlo, en este caso, y gozar de alguna ocasión más para poder habernos llevado los tres puntos del campo del Belchite, que siempre es un campo complicado.
Al final, creo que el fútbol fue justo con nosotros, incluso podíamos haber merecido más.
La conexión entre los jugadores, desde las primeras semanas ya se veía que había mucha química entre nosotros y, pienso que en los partidos de pretemporada y, sobre todo, en este último contra el Belchite ayer, se ha visto que el equipo conecta, se siente cómodo, para demostrar que este equipo sigue creciendo y está haciendo las cosas bien.