Sin grandes ocasiones por ninguno de los dos equipos, salvo una en la segunda parte, un disparo de Fonsi al palo y otra nuestra que ha salido repeliendo el palo de Iñaki.
Creo que es un partido que estaba destinado al empate.
Una acción desafortunada nos cuesta por autogol de un jugador nuestro como es Karol, el uno a cero. En esto del fútbol ya sabemos que la suerte y la mala suerte también influyen.
A partir de ahí en otro córner a renglón seguido, el primero gol ha sido en el ochenta y uno y el segundo en el ochenta y siete, el dos a cero que, a la poste, ha sido lo que es el partido.
Al final, tampoco hay que sacar muchas conclusiones.
Ha sido un partido de mucha disputa, de pocos pases, de muchísimo respeto, y al final, pues bueno, dos jugadas afortunadas por su parte y desafortunadas por la nuestra, nos han costado los puntos.
Como le he dicho al equipo, no pasa absolutamente nada. Esto continúa. A partir de mañana volveremos a la carga y a ver si somos capaces de en el siguiente partido, hacer bueno el trabajo porque el equipo está bien.