Nos vamos a encontrar un Caspe, un equipo hecho para cotas más altas y que está ahí por casualidad.
Ante un buen equipo, un partido duro, de intentar cometer pocos fallos los dos equipos y será un partido de detalles, creo yo.
Hubo un cambio de entrenador, un cambio de dinámica, esto hizo que el equipo se activara y conseguir empezar a sumar.
Conseguir la primera victoria, eso impulsó, cogió aire fresco para el equipo y, a pesar de las dos derrotas que llevamos ahora consecutivas, el equipo ha cambiado un poco la dinámica y la manera de afrontar los partidos.
Nos enfrentamos a un rival herido. Jugar contra el Caspe no es el mejor momento nunca. Mucho respeto al Caspe y no sabemos si es el mejor día para enfrentarnos. Cuando acabe el partido sabremos si ha sido el mejor día o no.