Temporada 1923/24

Y llegó el partido de la inauguración.

El campo estaba situado a la izquierda de la carretera de Alcañiz "...pasada la Torre de Pío en terrenos de la Ramona", recuerda don Teodoro Lasheras. "...había una senda cuando empieza la cuesta y se subía por allí para no ir por la carretera", nos cuenta don Vicente Barceló Landa. "El Noticiero" publicaba en aquellas fechas "...han arrendado unos terrenos incultos que no tienen otro defecto que el estar lejos de la población. Están en la cima de un cabezo con dimensiones reglamentarias y con capacidad para varios millares de espectadores". Es, en definitiva, el primer campo de fútbol reglamentario que dispuso el equipo caspolino donde poder jugar partidos amistosos y de campeonato, el hoy solar ocupado por las naves de la firma deportiva Adidas.

Era el 16 de agosto de 1923, en plenas Fiestas Patronales y se enfrentaban el Club Deportivo Caspe y la Universitaria de Zaragoza.

El rotativo zaragozano "Heraldo de Aragón" recogía en sus páginas la reseña de este primer encuentro en un artículo firmado por b.,

"El día 16 a las cinco y treinta de la tarde, se inauguró oficialmente el campo de fútbol de la Sociedad Club Deportivo Caspe. El interés suscitado en esta ciudad y en los pueblos comarcanos al anunciarse tal acontecimiento quedó en evidencia la tarde mencionada, viéndose sin cesar un magnífico desfile de carruajes y automóviles por las calles y paseo que forman el trayecto hasta el campo de fútbol. En este lugar la animación del público era extraordinaria, tributando un saludo entusiástico a los jugadores del Caspe que aparecieron equipados de negro y amarillo.

Con toda solemnidad el señor cura regente bendijo el campo. Los jugadores de la Sociedad Deportivo Universitaria y el Club Deportivo Caspe convenientemente alineados lanzaron sus vibrantes hurras, la música de la Banda municipal pobló el aire de sonidos izándose las banderas de ambas sociedades flanqueando en la tribuna presidencial y dado el kick-off por el alcalde comenzó la lucha del siguiente modo.

Deportivo Universitaria: Blesa; Beltrán (J), Monforte; Berges, Beltrán (E), Pérez Armendía; Beltrán (L), Sixto, Blesa (F), Navarro y Martínez.

Club Deportivo Caspe: Navarro; Morera, Faci; Castillón, Abellá, Gilaberte; Miravete, Jover, Morales, Catalán y Juan.

En el primer tiempo salieron todos muy animosos jugando a mucho tren, pero a los quince minutos decayó algo el juego a causa del calor. Hubo alguna lucha notándose bastante dominio por parte de la Universitaria sobre el Caspe y por fin Beltrán (L) avanzando solo y sorteando a los contrarios marcó el primer tanto a favor de la Universitaria, tirando un shoot cruzado.

En el segundo tiempo, adviértese que los del Caspe quieren tomarse la revancha. Al principio el juego se presenta muy equilibrado, batiéndose la línea de defensas del Caspe. Los delanteros unen poco pero van entendiéndose y consiguen dominar a la Universitaria, logrando empatar con un gran gol que marca Juan, después de una furiosa mele ante la puerta de la Universitaria.

Al terminar el partido salen los jugadores del campo en medio de grandes ovaciones. Arbitrio acertadamente, Amado Monforte, Secretario del Colegio de Arbitrios de Aragón. El partido resultó muy agradable.

Por la noche, el Club Deportivo Caspe obsequió con un espléndido banquete a sus compañeros del Deportivo Universitaria, reinando la mayor alegría. Después se trasladaron al Círculo de Caspe donde se celebró un baile en su honor".

Partido con resultado final de empate a un gol, que dejó contentos a todos y que, incluso, tuvo su anécdota. Esta fue recogida por "El Noticiero" al enjuiciar al colegiado "el árbitro, bien; si de algo pecó fue de benevolencia, muy digna en partidos de la naturaleza del reseñado en el que por no faltar nada, tuvimos un -Casus belli-, al detener el balón un distinguido Guardia municipal que ayudaba a Navarro a defender la puerta".

Bromas aparte, fue la primera confirmación seria, tras la formación del Club, que el fútbol en Caspe había nacido con suficiente fuerza, como para que a partir de aquellos momentos formara parte activa en la vida de la población. Máxime teniendo en cuenta las personalidades, dentro del mundo del fútbol aragonés de la época, que se desplazaron a Caspe para presenciar tan magno acontecimiento, los señores Gayarre y Aizpurúa (fundadores de la Federación Aragonesa), el mencionado Amado Monforte (Secretario del Colegio de Arbitros) y Ramón Camón.

No obstante, todavía tenía que pasar un año para que el Club obtuviera su mayoría de edad y sus directivos decidieran inscribir al equipo en competiciones federadas. Mientras tanto, se disputan partidos amistosos entre el Caspe y los equipos más cercanos geográficamente.

Relación que comienza con un partido no concluido en Maella. Estaba en todo su apogeo el mes de septiembre del 23 cuando es invitado el Caspe a viajar a la vecina localidad maellana para la inauguración de su campo de fútbol. El partido tuvo que suspenderse al pitar el árbitro (un jugador de un equipo de Zaragoza) un penalty a favor del Caspe, mostrándose contrarios a que se lanzará los jugadores del Maella.

En cuanto a la Federación, la Asamblea de Clubs que se celebra en Zaragoza los días 25 y 26 de octubre decide la confección de los calendarios en las diferentes categorías.

En Primera A juegan: Iberia, Fuenclara, Stadium y Universitaria.
En Primera B: Aragón, Zaragoza, Huesca y Agrupación.
En Segunda B: Gimnástica, Español, Recreación y Aguila, y
En Segunda Categoría B lo harán: Patria, Norte, Jaca, Borja, Binéfar, España, Mallén y Daroca.

La inscripción federativa consta de una cuota inicial de 25 pesetas, teniendo que pagar los clubs una cuota mensual de 5 pesetas más.

El Caspe por su parte, sigue con partidos amistosos que le den una clara idea del potencial que tiene el equipo. Los primitivos jugadores (fundadores), pertenecientes a familias acomodadas, por los gastos que origina la práctica del fútbol, van dejando paso a otros con menos posibilidades económicas. Se realizan incluso, los primeros fichajes (Chiprana, Fayón y Flix).

Así, en el mes de octubre juegan dos equipos del pueblo terminando el partido con empate a cero. El 4 del mes siguiente, el Caspe juega en casa y pierde frente al Flix por cero a tres y el 2 de diciembre los caspolinos ganan por cuatro a cero al Sarcoma (Estudiantes Facultad Medicina de Zaragoza).

El último domingo de 1923, el Caspe juega y vence al equipo del Banco de Aragón de Zaragoza por tres a dos, con goles de Robirosa y Jover en dos ocasiones. La reseña del partido en el periódico "El Guadalope" significa el gran número de personas que asisten al partido (unas dos mil) "...a pesar de la desagradable tarde por el fuerte viento reinante". Al descanso se llegaría con la ventaja del visitante por dos a cero, resultado que variaría en la segunda mitad al cambiar de campo los equipos y con ello la ventaja del meteoro. Destaca el cronista al "...guardameta Victorio Catalán y los corners de Robirosa que no hay quien los iguale, ya que cae el balón perpendicular al centro de la puerta, como puesto por una mano poderosa". Son los fichajes con los que cuenta ya el equipo: El portero de Chiprana y el lanzador de Flix. Arbitra con gran acierto el aficionado caspolino, señor Minguet.

El nuevo año trae consigo dos partidos más, en este caso frente al Fayón. El día de Reyes, en Fayón, con resultado final de empate y el domingo siguiente la vuelta en Caspe, con victoria local por tres a uno.

El 20 de enero se celebra la festividad del Patrono San Sebastián con el partido Caspe dos-Universitaria (tercer equipo) cero, y el 6 de abril de 1924, Caspe cero-Iberia SC. tres, con arbitraje del señor Aróstegui. Era costumbre, según nos dice don Vicente Barceló Landa, que la Banda de Música amenizara los descansos.

MEMORIA DEPORTIVA: Diez partidos jugados (todos amistosos). Cuatro victorias, dos empates y tres derrotas, más un partido inconcluso.